Esta preciosa eriza es Blanca, una eriza europea a la que bautizamos así debido a su peculiar color, mucho mas claro que el de otros ejemplares de su especie. No es que las púas fueran más claras como pasa con los erizos que denominamos «rubios», sino que tenía un gran número de ellas completamente blancas sin color, lo que le daba ese aspecto tan claro y especial.
Fue encontrada cerca de una zona urbana y las personas que la encontraron creyeron que lo mejor para ella era llevársela a casa. Por suerte, se dieron cuenta que una jaula no es un lugar adecuado para un animal salvaje (además de no estar permitido) así que se pusieron en contacto con nosotros para buscar una solución para la pequeña.
Hacía algunos meses que estaba en cautividad, así que era importante no liberarla de golpe y dejarle un tiempo de aclimatación antes de devolverla a la libertad. Por suerte nuestros amigos de la asociación medioambiental La Sínia tenían un cercado para erizos en el que acogen a los ejemplares de su proyecto de reintroducción y se ofrecieron a tenerla un tiempo allí para que se acostumbrara de nuevo a no tener un plato de comida siempre disponible y ser capaz de apañarse ella solita.
Y tras unas semanas de adaptación, Blanca pudo ser liberada en una zona cercana a la que fue encontrada pero mucho mas segura y con abundante alimento y agua a su alcance.
¡Suerte preciosa!
